El poeta Antonio Praena reseña ‘Para decir amor, sencillamente’, la antología-homenaje a Rafael Guillén en la que participa con un poema en ‘El atril de los dominicos’, su blog personal:

«Admirar es no solo un derecho, sino una necesidad. Admirar bien.

Las formas de posterioridad a lo moderno, las post, trans y contramodernidades incurren en error de engañarse cuando siguen adorando al ego y lo siguen situando en el centro de todas las demandas, incluso las que se erigen en nombre del altruismo. El consumo es la nueva religión y el yo crece estando a la venta; el narcisismo es nuestro índice de mercado. Antes que ser invisibles o inexistentes, demandamos para ser demandados, expuestos y cotizados.

Por eso son tesoros a proteger los actos de admiración. Olvidar admirar, verdaderamente nos achica. Decir, sin más interés oculto, «esto es bueno, esto debe ser conocido, esta obra debe formar parte de un nosotros» es imprescindible para no ahogarnos en nuestros pozos ciegos.» […]

La reseña completa, en este enlace.